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Tu preparación para la actividad física

Como sabes, la actividad física y la práctica deportiva tienen innumerables beneficios para tu salud, apariencia, ánimo, desarrollo social, rendimiento académico, etc.

Si estás pensando en un programa de actividad física, es importante que lo planifiques.

Para empezar, requieres de ropa y calzado adecuado, así como alimentación, hidratación y descanso acordes a la actividad que vayas a realizar. Y no olvides la protección solar.

No todos los deportes son iguales, y las personas tampoco. Es importante que lo pases bien practicando tu actividad.

Para elegir un deporte, fíjate en tu edad, condición física y medidas de tu cuerpo, por ejemplo el básquet es un deporte para personas más bien altas.

Las capacidades físicas básicas son condiciones internas de cada organismo, determinadas genéticamente, que se mejoran por medio de entrenamiento o preparación física y permiten realizar actividades motoras, ya sean cotidianas o deportivas. Estas cualidades, dependiendo del esfuerzo y actividad que realices diariamente, determinan tu condición física.

Tu condición física considera: tu fuerza muscular, flexibilidad, coordinación, velocidad y resistencia. Estas se pueden mejorar, pero como es distinta en cada persona, es muy importante que las conozcas antes de entrar a un programa de ejercicios. Se mide en el el colegio, y en algunas instituciones de educación superior. Si no es así, acércate al profesor del área y pídele que mida tu condición física.

Para ello existen diversas pruebas estandarizadas que te pueden indicar qué, y cuánto, ejercicio o deporte puedes realizar. Recuerda que la condición física mejora con la práctica. A medida que te ejercites, se te hará más fácil y entretenido y, como estimula tu ánimo, cada vez tendrás más ganas de hacerlo. Su efecto en tu salud será progresivamente mayor.

DEBES TENER EN CUENTA…

Cada actividad deportiva tiene exigencias distintas, y tampoco es igual si haces deporte por recreación o deporte competitivo.

Un deportista competitivo, también llamado de elite, tiene requisitos de salud un poco más exigentes. Para empezar, un equipo de profesionales atiende sus requerimientos y posibles enfermedades o lesiones. Tiene controles médicos enfocados a su desempeño, evaluados por un médico especialista en deporte, o un cardiólogo, con exámenes específicos para descartar enfermedades (especialmente del corazón) que se agraven a causa de su exigencia deportiva

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Aunque hagas deporte solo por recreación o amistad, no debes despreocupar tu salud. Lo primero es elegir el deporte que más te guste y ver si tienes condiciones para realizarlo sin problemas.

Entonces, conoce tu condición física para evitar lesiones y sobreexigencias, especialmente al comienzo. Los deportes que más lesiones ocasionan en Chile son: ciclismo, básquetbol y fútbol. Las más frecuentes son las lesiones de ligamentos, como esguinces, desgarros musculares, y lesiones del cartílago de crecimiento.

Existe un porcentaje muy pequeño de personas que no es apta para hacer deportes porque tienen alguna condición médica asintomática, generalmente cardiovascular, y muchas veces congénita, que se puede gatillar con la práctica deportiva y producir desde desmayo hasta la muerte súbita.

Por esto, antes de hacer deporte, te recomendamos acudir a un médico o cardiólogo si tienes:

  • Antecedentes familiares de muerte súbita en parientes (padres, hermanos, tíos o abuelos) de menos de 40 años de edad.

  • Antecedentes familiares de enfermedades cardiológicas, desmayos, dolor al pecho, arritmias, falta de aire.

  • Antecedentes de enfermedades graves o cirugías, especialmente de tórax.

  • Arritmias o soplos cardiacos.

  • Presión arterial elevada.

También si presentas antes, durante o después del ejercicio:

  • Palpitaciones

  • Dolor al pecho, con o sin palpitaciones

  • Palidez

  • Desmayos

  • Cansancio extremo

  • Falta de aire.

Otros riesgos

Si sufres de trastornos alimentarios como anorexia nerviosa o bulimia, puedes tener alteraciones estructurales del músculo cardíaco y alteraciones de los electrolitos sanguíneos, lo que te puede producir arritmias cardíacas.

Los tratamientos con hormona de crecimiento, el consumo de alcohol, el consumo de precursores esteroidales (para desarrollar masa muscular), cocaína, anfetaminas, y efedrina, constituyen un importante riesgo de descompensación durante el ejercicio.

Por último, las personas obesas, sin hipertensión arterial, no tienen contraindicación de ejercitarse. Al contrario, con el deporte y la actividad física, más que desventajas, tendrán grandes beneficios.